Ahora, el antikirchnerismo de Bruera roza lo insólito: con recursos municipales, montó una falsa ONG (no tiene personería) llamada "Conciencia Ciudadana" que recorre las calles de la capital provincial ofreciendo un servicio inédito: te arma la boleta a medida, siempre alentando la presencia de Bruera pero con diferentes candidatos presidenciales.
A esto se le suma el enorme despliegue territorial del espacio bruerista para repartir una boleta específica en la periferia de la Ciudad: Duhalde Presidente - Scioli Gobernador - Bruera Intendente.
Así las cosas, vemos como Bruera retoma su histórica tendencia a la traición y utiliza sin ruborizarse cualquier estructura partidaria para evitar el papelón que protagonizó en las PASO: se vende como kirchnerista (en los carteles en los que aparece junto a CFK), como peronista federal (reparte una boleta con Duhalde como Presidente), como vecinalista (su campaña se basó, sobre todo de cara a las PASO, en su figura y su nombre de pila).
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