martes, 24 de mayo de 2011

GATILLO FÁCIL




Husmeando por el ciberespacio del Facebook, me encontré con un  nefasto grupo llamado “Apoyemos a la policía de Bariloche”. Este conjunto fascistoide fue creado luego del caso de gatillo fácil en la ciudad sureña  en junio del 2010. La policía mato por la espalda a un joven de 15 años, Diego Bonefoi. Al día siguiente, durante el velatorio, disparó contra sus familiares y amigos y resultó muerto otro joven, Sergio Cárdenas de 28 años. Las protestas por las muertes continuaron y así fue como, a los dos días del fallecimiento de Diego, hubo más de 20 heridos y murió otra joven víctima de la represión policial, Nicolás Carrasco de 16 años.

Desde ese día a esta parte, han desfilado por Bariloche distintas manifestaciones de la población local. Unas que tristemente quieren que los policías involucrados queden eximidos de toda culpa y castigo; mientras que  otras exigen justicia por los chicos muertos por gatillo fácil y represión el año pasado. 

Las personas que adhieren a dicho grupo (2207 la última vez consultado), no quieren que estos policías sean debidamente enjuiciados como están siendo. Mientras tanto, la querella  pidió cadena perpetua para el Cabo Colombil, la defensa su absolución y en estas semanas, se decidirá el destino de este policía apartado de su cargo desde junio.

Los hechos hablan pos sí mismos, tres jóvenes muertos en tres días es un récord de gatillo fácil para un pueblo como Bariloche. De más esta decir que hubo uso y abuso de la autoridad y de ese poder que sienten por portar un arma reglamentaria. No hay excusas ni justificaciones posibles. Hubo represión, hubo asesinatos, hubo gatillo fácil, debe haber justicia.

Para volver al temerario grupo que encontré en la facebookgalaxia, se leen cosas realmente de otro tiempo y de otro espacio. Desde comentarios de aliento a la autoridad policíaca: “YO APOYO A LA POLICIA DE BARILOCHE! BASTA DE DEFENDER A LOS DELINCUENTES, ESE PENDEJO ESTABA ROBANDO!!!” o “Apoyo por mas seguridad para bariloche basta de esa gente (si se las puede llamar gente)ke roba mata y hace de la suya ke entra por una puerta y sale por la otra”, reproducción exacta de los post; hasta mismos uniformados que alientan, por medio de esta red social, a sus sicarios compañeros. A su vez, está plagado de justificaciones que establecen que ese policía “hacía su trabajo, cumplía con su deber,  usó su herramienta de trabajo”, como si utilizar un arma para matar por la espalda a un joven sea cumplir con su labor. Un policía es un ciudadano con el deber de proteger a los demás; el abuso y uso ilegítimo de la fuerza generan este tipo de situaciones, provocan aún más, la tan mencionada, inseguridad. Estos agentes públicos se convierten en peligrosos y pierden credibilidad ante la sociedad cuando crean una escena de dolor y espanto al asesinar a una joven víctima.

Una chica publicó un video de un conocido personaje del metal argentino, Ricardo Iorio, famoso no sólo por su música, sino también por sus comentarios xenófobos publicados en distintos medios de comunicación. El nombre del video posteado es una declaración de él en un canal de la tv: “Sepan ustedes los cumbias, ustedes los giles”.

En este grupo también se encuentran notas de personas que se unieron sólo para defenestrar la iniciativa. Una joven los llama varias veces “fachos” y también se queja de la eliminación de sus posteos. Otro chico puso: “Estoy indignado vecinos. Como puede ser que a gente honesta como nosotros nos traten como a ellos. Yo tengo un perro policía que tiene toda una familia que alimentar. El siempre dio la vida por nosotros y ahora por culpa de estos, no sabe si volver a  ladrar a las calles con su uniforme”.

En contraste a esta ironía que descontractura la lectura de las ideas reaccionarias que pueden leerse aquí, aparece alguien con el tenebroso nombre de “Ultraderecha Argentina” que dice: “la policía debe cumplir sus funciones. La pistola no la tiene de adorno, así que si se ven obligados a apretar el gatillo no son "gatillo fácil", son HÉROES, custodios de nuestra seguridad”. Para el que escribió ésto, matar a un chico por la nuca y luego a dos pibes más, son actuaciones heroicas. Los peligrosos no son sólo los policías que disparan a quemarropa sin medir las consecuencias, sino también esta gente que sustenta, apoya y promueve su accionar. Comentario seguido a éste, estaba el de los “Intelectuales Pro” que en la misma línea proclaman: “Bala a los delincuentes, mejores sueldos a los policías”. En otras palabras,  gatillo fácil y represión  son  las soluciones que sostiene este grupo que se auto proclama intelectual y que está a la derecha del primer mandatario porteño, Mauricio Macri.

Fomentan el asesinato, el crimen, la muerte de personas, jóvenes o no, que más que culpables son víctimas de situaciones que tienen otro remedio, más sano, más constructivo, más productivo. Desvalorizan la vida de los otros para priorizar la de ellos, sus intereses, sus comodidades y promulgan la mano dura como parte de su construcción política. Ésto es PRO señoras y señores.

Tiene una foto de perfil de Mauricio, trabaja en el Gobierno de la ciudad y estudió en la UCA. Tiene alrededor de 400 “amigos”, ayuda a la campaña del cómico Del Sel en Santa Fé, critica al gobierno nacional sin argumento sustentable, se enoja con Alfonsín que no quiso aliarse a Macri, le pega a Solanas porque no le tiene simpatía y alienta al grupo Clarín cada vez que puede. Ésos son algunos de los datos que se pueden ver en este patético grupo de “intelectuales”.

Con algo de temor y mucha indignación se acaban estas líneas que contaron sólo un poco de toda la basura que da vueltas por el ciberespacio. Se debe tener en claro de dónde y de quiénes provienen esos comentarios discriminatorios y represivos. Tienen que ser sometidos a una crítica acérrima  y trasladarla a una lucha cotidiana a favor de la justicia y en contra de la represión y el gatillo fácil.

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