Aquel dirigente o analista político (u opinólogo, a secas) que pretenda manipular con cierta destreza el argot político del aquí y ahora, de la actualidad fulminante, debería ofrecer una definición tajante sobre las "colectoras". En un año electoral enmarcado en una iconografía que todavía, a esta prematura altura, no ofrece certezas de ningún tipo (el mosaico multicolor que ofreció ayer el estadio Unico en su reinauguración fue un poema a la liturgia y a la palabra que define por antonomasia al peronismo: amplitud) existen, sin embargo, un par de berretines profundamente arraigados a la coyuntura. El de las "colectoras" es uno de esos berretines.
Las "colectoras" no son ni de izquierda ni de derecha, ya son un patrimonio universal. Le pegan, dicen que dicen, los intendentes peronistas del denostado conurbano porque la candidatura de Martín Sabbatella para gobernador quitaría porotos valiosos. Y, además, dicen que dicen que los compañeros intendentes estarían nerviosos por el peronismo aguado de CFK. Pero también le dan por ¿izquierda?, como por ejemplo Mario Mazzitelli, Secretario General del Partido Socialista Auténtico en Proyecto Sur (estuvo ayer en La Plata inaugurando la casa Pino Solanas, sede de PS), que lanzó temerarias declaraciones en medio de la multitud (¿100 personas es una multitud?) que se acercó al estreno de la casade Pinus: hay sectores que dicen ´se han hecho cosas pero falta mucho por hacer´, y yo me pregunto: ¿Qué es lo que falta por hacer? ¿Falta seguir saqueando a la Argentina? ¿Falta agotar los yacimientos petrolíferos? ¿Falta reventar más montañas para llevarse el oro, la plata y el cobre?. Nosotros tenemos que terminar con el modelo de saqueo, y no nos confundamos: las colectoras y en particular la que se está haciendo en la provincia de Buenos Aires con (Martín) Sabatella tiene una finalidad reaccionaria que es frenar el crecimiento de Proyecto Sur".
Por derecha también le entran a las colectoras (sic) Mauricio Macri (que no sólo quedó enmarañado en el cuentito infantil de la nueva política al cerrar acuerdos con Eduardo Duhalde vía Cristian Ritondo que se extenderán hasta una casi segura alianza electoral, sino que proyectaba él mismo una candidatura testimonial en la ciudad por las dudas que no llegara a la presidencial) y Pancho De Narváez.
Ahí están las pobres colectoras, bastardeadas por todos lados. Che, tan mala son las colectoras¿?
Para finalizar, una definición política desopilante del reemplazante de Miguel Del Sel (en Midachi, no en la candidatura a la gobernación de Santa Fe).
El Movimiento Proyecto Sur no es un partido político, si no un Movimiento político, social, cultural, ambiental, juvenil, nacional, popular y latinoamericano, es algo muy amplio.
Mario Mazzitelli.
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