SEPA USTED, QUERIDA SEÑORA QUE EN ESTE MOMENTO TIENE UNA REVISTA CARAS EN LA MANO Y ESPERA EL TURNO PARA QUE LE TIÑAN EL PELO EN UNA PELUQUERÍA PAQUETA, QUE VIVE EN EL PAÍS MÁS IGUALITARIO DE AMÉRICA LATINA

Días atrás, posteamos que según un estudio de Latin Business Chronicle -espirit de finesse, carajo! reload!- Argentina era el país más rico de América Latina en términos del Producto Interno Bruto (PIB) per cápita por paridad del poder adquisitivo: 14.561 dólares por pera...siempre que veo este tipo de cifras me pregunto donde estará la parte que me falta.
En ese sentido, en el desbalance entre los tecnicismos económicos y la magnitud de los bolsillos populares, la noticia no dejaba de ser un indicador económico macro y listo. Digo, no nos llena el corazón.
Sin embargo, hoy sí que nos topamos con una EXCELENTE NOTICIA: la Argentina, nuestro amado país, es el más igualitario de la región. La concluyente data surge del exhaustivo estudio que el Conicet y otros institutos realizaron acerca del impacto de la Asignación Universal por Hijo en los sectores vulnerables.
Los resultados son esclarecedores, estremecedores: la indigencia bajó hasta el 70% y la pobreza entre el 13 y el 30, según los parámetros que se tuvieron en cuenta (no sólo los datos del Indec).
Además, el impacto de la AUH significó un acortamiento en la brecha entre lso sectores más ricos y los más vulnerables, a tal punto que el nivel de desigualdad es el más bajo desde 1986 lo que deja a la Argentina como el país más igualitario de América Latina.

Para resumir: un decreto del gobierno troskoleninisna (dixit Abelito Posse), de la dictadura K (copyright Grupo Clarín), del Régimen (Morales Solá y Marianito Grondona) que se convirtió en un nuevo derecho y una harramiento vital en la batalla contra la desigualdad.


Algunos datos duros:
- La asignación por hijo sacó de la pobreza a entre 1,4 y 1,8 millón de personas. De ellas, entre 700 mil y 1,1 millón tienen 18 años o menos.
- La pobreza bajó entre 32,6 y 13,1 por ciento, según se tomen el IPC del Indec o el IPC de las siete provincias. En números absolutos, la tasa de pobreza cayó de 14,1 por ciento en el segundo semestre de 2009 a 9,5 por ciento tras la implementación de la AUH en el primer caso. Si la pobreza se calcula con una canasta básica total que surge del IPC de siete provincias, el descenso en números absolutos es de 26,0 a 22,6 por ciento.

- Entre 1 millón y 1,5 millón de personas abandonaron la condición de indigentes. De ellos, entre 680 mil y 1,03 millón tienen 18 años o menos. La indigencia retrocedió entre 68,4 y 54,7 por ciento, con los dos IPC. El nivel de indigencia bajó de 3,2 a 1,2 por ciento de las personas con el IPC Indec, y de 7,5 a 3,4 por ciento con el IPC siete provincias.
- En la región Noreste, sobre cada diez indigentes, ocho dejaron de serlo a partir de la asignación por hijo.

“La Asignación Universal por Hijo es lo contrario a la concepción del derrame de los ’90. En aquel caso se proponía que las ventajas del crecimiento económico generado por una cúpula cayeran sobre el resto de la sociedad. Ahora, el dinero aparece por abajo –con todos los reparos que tenemos por esa expresión– y derrama hacia arriba: aumentó la demanda para la industria alimenticia, textil, de juguetes, para el comercio y otras actividades”, describió Demián Panigo, del Conicet.

Acá una nota completa al respecto de David Cufre para Págína/12
Acá, la opinión y el análisis de Alfredo Zaiat para desbaratar un cliché impuesto por Clarinete: "le están robando la plata a los jubilados": el Fondo de Garantía de Sustentabilidad y la transformación del sistema de seguridad social.